Calculadoras de Fecha y Hora
Calculadora de horas


Calculadora de horas

Esta calculadora de horas en línea es ideal para calcular las horas trabajadas para que los empleadores puedan determinar el salario con precisión.

Horas

9 horas 12 minutos

o 9:12:00

o 9.2 horas

o 552 minutos

Hubo un error con tu cálculo.

Tabla de Contenidos

  1. La calculadora de horas en línea
  2. ¿Cómo funciona?: Reglas para el uso de esta calculadora
  3. Ejemplo
  4. Problemas que resolverá esta calculadora
  5. La historia de la jornada laboral de 8 horas
  6. Los tipos de horarios laborales
    1. Semanas laborales cortas
    2. Jornadas laborales cortas
    3. Jornada por turnos
    4. Horas extras
    5. Contratos por asignación y trabajo independiente
  7. La cantidad óptima de tiempo de trabajo

Calculadora de horas

La calculadora de horas en línea

El trabajo ha existido casi desde que existe el ser humano. Pero no así la remuneración. En los viejos tiempos, los siervos trabajaban en los campos a cambio de comida y alojamiento. Actualmente, a la mayoría nos pagan por horas. Por eso es tan importante tener una forma de contar las horas para asegurar el pago exacto fácilmente.

Aquí es donde entra esta Calculadora de Horas. Básicamente, se trata de una calculadora de tarjetas de tiempo en forma digital. Le permite al empleado o al empleador introducir una hora de inicio y de finalización y luego calcular con precisión cuántas horas se han acumulado. Pero eso no es todo. Si se fija bien, se dará cuenta de que esta calculadora de tiempo en particular tiene algunas ventajas añadidas que le encantarán a ambas partes del espectro salarial.

¿Cómo funciona?: Reglas para el uso de esta calculadora

El uso de este dispositivo como calculadora de tiempo no podría ser más fácil (o más preciso). Para empezar, hay dos botones de función básica en la parte superior. Uno es un reloj de doce horas (hora estándar), y el otro es un reloj de 24 horas (hora militar). Esto es importante no sólo para el personal militar, sino para los muchos países del mundo que prefieren decir la hora utilizando intervalos de 24 horas.

Una vez seleccionada esta función, la calculadora de reloj cambiará sus ajustes según las especificaciones del usuario. Para obtener un cálculo, los usuarios deben introducir la Hora de Inicio y la Hora de Finalización del trabajo. Si están utilizando la versión de 12 horas, pueden elegir entre AM y PM para garantizar resultados adecuados.

Una de las mejores cosas que tiene esta calculadora de tarjetas de tiempo en particular es que tiene un campo donde se pueden deducir los descansos, que por lo general no se pagan.

Ejemplo

Digamos que un empleado entra a las 8:12 AM y marca su salida a las 3:33 PM. Sin embargo, durante su tiempo en el trabajo, tomó dos descansos de 15 minutos. Se ingresaría la información mencionada anteriormente y luego, pondría “30 minutos” en la sección “Deducir descansos”. Si pulsa “Calcular”, esto daría como resultado las horas correctas: 6:51. Sin deducir esos descansos, obtendría un resultado de 7:21 y tendría que restar los descansos manualmente.

La mejor parte de usar esta calculadora de reloj de tiempo es que indica el tiempo total, el tiempo en forma decimal y el número total de minutos. En el caso del ejemplo anterior, serían 6:51, 6,85 y 411 minutos, respectivamente. Dado que muchos empleadores calculan las horas de diversas formas, esta versatilidad puede ayudarles a evitar pasos adicionales.

Problemas que resolverá esta calculadora

Puede ser difícil para los empleadores calcular el número de horas que trabajan sus empleados. Esta herramienta les garantiza que puedan hacerlo en múltiples formatos, permitiéndoles calcular el pago correcto fácilmente. Asimismo, los empleados pueden utilizar esta herramienta para saber cuánto dinero pueden esperar ganar en un día de trabajo determinado. No es ningún secreto que la gente vive con presupuestos muy ajustados. Sin embargo, esta calculadora le permite a una persona hacer un seguimiento de cuánto percibirá en su próximo recibo de sueldo.

Pero esto es sólo una muestra de los problemas que esta calculadora puede resolver. Por ejemplo, algunos sistemas de nóminas utilizan un formato de tiempo estándar para calcular las horas, mientras que otros utilizan el sistema decimal. Con esta calculadora, los usuarios pueden ver los resultados en ambas formas sin tener que hacer una conversión.

Algunos países y organizaciones utilizan la “hora militar” en lugar de dividir el día en dos mitades separadas de 12 horas. Esta calculadora digital tiene una función de reloj de 12 y 24 horas.

Aunque es poco frecuente, un usuario puede querer saber el número total de minutos trabajados. Esta información se muestra automáticamente junto a los resultados decimales y del tiempo total. Muchas otras calculadoras digitales de horas son muy sensibles al formato. No obstante, cuando se utiliza esta calculadora, se puede introducir 1225 o 134, y sabrá insertar los dos puntos. Esto asegura que el programa lea la información introducida como 12:25 y 1:34.

NOTA: Si se selecciona el “reloj de 24 horas”, leerá los resultados como 12:25 PM y 01:34 AM del día siguiente. Para obtener la 1:34 PM, tendría que introducir 1334.

Como se puede apreciar, esta es una calculadora de reloj de tiempo muy útil que podría aprovechar prácticamente cualquier organización que haga pagos a sus trabajadores. Aunque es simple en su propósito, tiene un montón de características útiles para hacerla más útil y precisa.

La historia de la jornada laboral de 8 horas

En muchas partes del mundo, la norma nacional para el empleo a tiempo completo es de 40 horas a la semana. El empleado promedio pasa al menos 35 horas a la semana en el trabajo. Esto suele ser cinco días de ocho horas al día. Trabajar menos de 35 horas a la semana se considera tiempo parcial.

La jornada laboral de ocho horas se originó en la España del siglo XVI. España fue el primer país en legislar la jornada laboral de ocho horas para los trabajadores de fábricas y fortificaciones en 1593.

El movimiento moderno a favor de la jornada laboral de 8 horas se remonta a la Revolución Industrial en Gran Bretaña, donde la producción industrial en grandes fábricas cambió la vida laboral. En aquella época, la jornada laboral podía oscilar entre 10 y 16 horas, la semana laboral solía ser de seis días y el uso de la mano de obra infantil era algo común.

La regla de las ocho horas de trabajo fue formulada por el empresario inglés Robert Owen en 1817 en forma de eslogan: “Ocho horas son de trabajo. Ocho horas son de descanso. Ocho horas son de sueño”.

La jornada laboral de 8 horas fue reconocida legalmente por primera vez en Australia en 1848 y en algunos estados de Estados Unidos. En 1868, en Estados Unidos, se estableció por ley una jornada laboral de 8 horas para los empleados y trabajadores de las empresas estatales.

El 1 de mayo de 1886 se produjo por primera vez en Estados Unidos un movimiento laboral masivo a favor de la jornada de ocho horas. Los trabajadores de Chicago organizaron una huelga colectiva para exigir una jornada laboral de ocho horas. Las condiciones de trabajo de la época eran difíciles. Los trabajadores recibían salarios bajos, la jornada laboral era de 12 a 15 horas, los empresarios utilizaban mano de obra infantil y los trabajadores no tenían garantías sociales. 350 000 trabajadores estadounidenses de todo el país participaron en la huelga.

Después de la Primera Guerra Mundial, comenzó la democratización de la vida pública en muchos países, y el movimiento por los derechos de los trabajadores empezó a crecer. En relación con esto, la jornada laboral de 8 horas comenzó a tener más presencia en Alemania, Francia y Gran Bretaña. La segunda “ola” de legalización de la jornada laboral de 8 horas se produjo en los años 30 y 40, cuando la jornada laboral de 8 horas comenzó a implantarse en países asiáticos y latinoamericanos.

Para el 2013, el Convenio sobre las Horas de Trabajo (Industria), que define la jornada laboral de 8 horas, ya había sido adoptado en 52 países.

Algunas personas que cobran por hora intentan trabajar el máximo de horas. Pero algunos trabajadores prefieren un horario flexible. Así pueden realizar sus tareas en un tiempo más corto y dedicar el tiempo restante a descansar.

Los tipos de horarios laborales

Un horario de trabajo estándar supone que los empleados deben estar disponibles durante el horario comercial de su empresa. Por ejemplo, de 8 a 5, cinco días a la semana.

Aparte de las condiciones de trabajo estándar, ahora las empresas están implementando horarios de trabajo alternativos. Entre esos, hay opciones como:

Semanas laborales cortas

Una semana laboral de cuatro días con más horas de trabajo al día. Por ejemplo, un empleado puede trabajar cuatro días a la semana y 10 horas por cada día de trabajo.

Jornadas laborales cortas

Los empleados trabajan menos horas a la semana. Pero siguen teniendo que realizar todas las tareas previstas para el día o la semana. Las jornadas laborales más cortas hacen que la gente esté más motivada y enfocada en su trabajo.

Jornada por turnos

Las empresas que trabajan 24 horas al día utilizan este tipo de horario. La mayoría de los empleados trabajan en horas diferentes, pero se solapan durante una hora con el siguiente turno. Con este horario, los empleados deben descansar al menos ocho horas entre turnos.

Horas extras

Los empleados trabajan más de las 40 horas semanales estándar. Las horas extra trabajadas se pagan con una tarifa más alta.

Contratos por asignación y trabajo independiente

En este caso, el número de horas trabajadas depende del empleado siempre que cumpla los requisitos del empresario. El empleado recibe un precio fijo no por las horas trabajadas sino por los resultados de las tareas realizadas.

Los empleados pueden trabajar menos horas o incluso dedicar un día entero al trabajo si les conviene. Si son productivos y entregan sus resultados a tiempo, la empresa les permite trabajar conforme a su preferencia. Los profesionales independientes suelen utilizar este horario.

Los horarios de trabajo mencionados son adecuados tanto para el trabajo en la oficina como para el trabajo a distancia. Afectan al bienestar y la productividad de los empleados de forma diferente, pero muchas empresas siguen prefiriendo la semana laboral estándar de 40 horas.

La cantidad óptima de tiempo de trabajo

La jornada laboral de ocho horas ha sido la norma durante más de cien años. Pero muchos estudios afirman que ocho horas al día es demasiado para trabajar.

Los estudios de la Organización Mundial de la Salud demuestran que trabajar demasiado provoca una muerte prematura. Las personas que trabajan demasiado son propensas a sufrir derrames cerebrales y enfermedades cardíacas. En Japón existe un nombre para la muerte por exceso de trabajo: karoshi. Algunas personas trabajan más de 100 horas a la semana, lo que perjudica su salud.

Hay casos de emergencia en los que un proyecto requiere tiempo extra. Pero si una persona permanece en el trabajo con regularidad y no se da tiempo para descansar, empieza a sufrir de exceso de trabajo y ansiedad. Entre los síntomas del exceso de trabajo, los médicos distinguen los siguientes:

  • agotamiento físico, dolores de cabeza, dolores musculares, problemas de corazón y de estómago;

  • problemas de memoria, sedación y otros tipos de deterioro cognitivo;

  • disminución de la motivación, falta de ganas de trabajar, menor compromiso;

  • problemas emocionales en forma de mayor irritabilidad, agresividad o apatía.

El exceso de trabajo puede conducir al agotamiento emocional. El agotamiento es un estado de desgaste emocional, mental y físico resultante del estrés crónico en el trabajo. Un mayor número de horas de trabajo no significa necesariamente que sea más productivo. Los estudios muestran que la productividad por hora disminuye si se trabaja más de 50 horas a la semana.

Una encuesta realizada en 2019 entre oficinistas británicos descubrió que las personas no solo se dedican a trabajar durante la jornada laboral. Entre las tareas laborales, consultan las redes sociales, leen las noticias, discuten temas no laborales con amigos o colegas, compran en línea, comen bocadillos, juegan y ven programas.

Estudios como éste han generado propuestas para reducir la duración de la jornada laboral. Los estudios han demostrado que la creatividad de las personas disminuye después de cinco horas de concentración. Algunos expertos en estudios laborales dicen que una jornada de 5 a 6 horas podría ser una mejor opción para los empleados. Cinco horas es el máximo en el que la mayoría de nosotros puede concentrarse bien en algo. Hay veces que se puede trabajar eficazmente durante más tiempo. Pero el empleado promedio puede hacer un trabajo de calidad durante unas cinco o seis horas.

Los resultados de los experimentos con horarios más cortos en diferentes empresas han sido tanto positivos como negativos.

Los empleados están encontrando formas más creativas de reducir el tiempo para actividades laborales específicas. La reducción de la jornada laboral puede conducir a una mejor gestión del tiempo y favorecer la concentración.

Por otra parte, al hacer más trabajo en menos tiempo, la gente se está exponiendo a más estrés. Los empleados intentan dedicar su tiempo únicamente al trabajo y no distraerse con conversaciones que no tienen relación con lo laboral. La cultura de la empresa puede verse afectada en estas situaciones. Cuando no hay tiempo para charlas, discusiones ajenas y cafés compartidos, esto afecta la lealtad, la cultura de equipo y las relaciones de la gente en la empresa.

Además, también hay argumentos a favor de la jornada laboral de 8 horas. Muchos trabajos no requieren un alto nivel de concentración y creatividad. Las personas que ocupan esos puestos pueden trabajar 8 horas al día sin sentirse estresadas. Asimismo, la jornada laboral de 8 horas permite dividir cada período de 24 horas en tres partes iguales.

La pandemia del coronavirus y las posteriores cuarentenas han obligado a muchos empresarios a experimentar con el control del tiempo de trabajo. El trabajo desde casa permitió a los empleados ajustar su vida personal a las responsabilidades laborales. Por otro lado, el trabajo desde casa ha difuminado los límites entre el trabajo y el hogar. Muchos empleados han empezado a quejarse de que ahora trabajan más en casa que en la oficina.

Por eso, cuanta más libertad y flexibilidad tiene una persona, más importante será que se convierta en dueña de su tiempo. Más importante será que calcule sus horas de trabajo y logre un equilibrio entre el descanso y el trabajo independiente.